Mantenedores de temperatura

¿Qué es un mantenedor de temperatura o mesa caliente?

El mantenedor de temperatura de alimentos, también conocido como armario armario caliente o mesa caliente, es un accesorio indispensable que toda cocina profesional requiere. Su finalidad es la de mantener los platos preparados calientes durante más tiempo, sin provocar que estos se quemen o estén cocinados de más.

Incluir una mesa caliente en la cocina o incluso una lámpara para mantener la comida caliente no solo facilitará la gestión térmica de los platos preparados, sino que también asegurará la calidad de estos productos así como ayudará a potenciar su sabor. En su conjunto, resulta un instrumento perfecto para cualquier restaurante o entorno en el que la demanda y eficiencia son claves para obtener el éxito.

¿Cuál es el objetivo de una mesa caliente en la cocina?

Instalar una mesa caliente tiene el fin de ejercer como vínculo físico entre la cocina de un establecimiento de hostelería y el área en el que se encuentra el comedor. De este modo, la zona de preparación de la comida así como la zona orientada a servir los platos quedan conectadas, garantizando que los platos siempre se encuentren a la temperatura adecuada para ser servidos.

Dependiendo de las necesidades de cada establecimiento así como el espacio reservado para esta tarea, podrás adquirir una mesa caliente de un tamaño reducido o algo más grande para dar espacio a una gran variedad de platos. La intención de este tipo de electrodoméstico es garantizar que puedas mantener en las mejores condiciones tus productos así como agilizar el trabajo.

¿Para qué sirve y cuánto cuesta una mesa caliente?

Una mesa caliente para restaurantes es perfecta para poder mantener tus platos calientes desde la cocina hasta que llegan a la mesa a los clientes. Con estas, ayudamos a que la comida se conserve en un entorno más limpio, así como ayuda a mantener los alimentos calientes durante un mayor periodo de tiempo sin que se resequen o acaben por cocinarse demasiado hasta pasarse. Con esto se asegura que la calidad sea siempre perfecta.

El precio de una mesa caliente depende del tamaño así como servicio que se quiera conseguir. De este modo, el precio puede oscilar desde los 200 euros con pantallas calientaplatos hasta superar los 1000 euros al obtener una mesa central caliente que pueda mantener calientes las comidas así como en las condiciones más óptimas de higiene.